En el anterior post comentaba algunas de las causas que nos
han traído hasta aquí.
Releyéndolo parezco un viejo amargado, le echo la culpa a
todo hijo de vecina; cuando en realidad, como en todas las situaciones
complejas, no hay ningún culpable absoluto recubierto de maldad y alevosía. Como
se leía en el mismo, todos somos un poco complices, unos más que otros, pero
todos hemos cooperado para que cientos de tractores invadan nuestras calles
buscando que "no se sabe quién" les asegure la viabilidad de las explotaciones
ganaderas.
El problema, es que sigo sin leer casi ninguna idea que pueda
cambiar de forma importante el sector y darle una posibilidad diferenciada de futuro.
Incluso en alguna cacareada alternativa, con pies de barro. La consecuencia son tractores girando y girando en torno a la Muralla de Lugo.
Lo que parece claro, es que cada tres años tenemos un pico y
posteriormente un abismo en los precios internacionales de la leche y de alguna
forma tenemos que estar preparados para este escenario. Durante los tiempos de
bonanza todos nos olvidamos del problema, con lo que las explotaciones tratan
de recuperase del anterior bache y de comprarse ese apero que tanto necesitan.
Las empresas se pelean por el último litro de leche, aunque esto suponga luego
negociar con márgenes ridículos con la distribución, lo que limita su capacidad
de inversión.
Volviendo a los ciclos, y ya que sabemos que existen, habrá
que pensar en amortiguar su volatilidad.
¿Pero nadie pensó en los fondos anticíclicos?
No se los que pensarían los socios de alguna cooperativa
cuando se les dijera que al precio de la leche en tiempos de bonanza se le iban
a retirar unos céntimos para tiempos peores, tampoco sé si alguien lo ha
intentado. Estos fondos no son la solución a todos los problemas, pero sin duda
algo ayudaría a las explotaciones más competitivas, capaces de alimentar al
ganado en base al territorio y no al maíz y soja producido más allá de los
mares.
¿Pero nadie pensó en movilizar la tierra abandonada de forma
efectiva?
El Banco de Tierra no es la solución definitiva, pero
tampoco es una iniciativa de comunistas descamisados, como fue tachada en su
momento. Reactivarlo de forma efectiva de una vez por todas, tampoco serviría de nada si las agrupaciones de productores no son capaces de cerrar los ciclos productivos para arañar valor
a lo largo de la cadena de valor.
¿Pero no ha habido iniciativas de creación de un GRAN GRUPO
LÁCTEO GALLEGO?
Desgraciadamente sí que ha habido varias, en fin, todos
conocemos los resultados de dichos proyectos, su manipulación y en casos mala
gestión. Pero aunque lo constituyamos ahora, lo primero será saber para qué y
otra vez el tapón de nuestro mercado único.
¿Pero nadie ha pensado en exportar y diversificar los
mercados?.
Aquí también ha habido algunas iniciativas, insuficientes
sin duda. Porque para exportar hace falta un mix entre las comodities y productos de valor añadido. Para ello, ya sabemos, mucho acero, buenos técnicos
y un I+D excelente.
¿Y no tenemos las herramientas para lograr ser punteros en
formación e I+D?.
Una vez más, también ha habido y hay iniciativas, en varias he
estado involucrado y también me culpabilizo de no haber sabido venderlas o administrarlas.
Pero en el mejor de los casos, ¿cómo hubiéramos sido capaces de competir con los
centros de investigación de cualquier multinacional del medio del ranking de
las 50 primeras del sector?.
¿Pero no es posible abrirnos al talento venga de donde
venga con costes razonables?.
Sin duda un procesos de innovación abierta podrían dotar al
sector de ideas con potenciales beneficios a un coste moderado, ya tenemos
otras herramientas, solo hacen falta proyectos realmente disruptivos, vengan de donde vengan. En cualquier caso
estos procesos son sin duda complicados, necesitan primero voluntad, ser liderados, tener una base
sólida, financiación y tiempo.
Supongo que en San Caetano no se leerá este post, pero aquí
le dejo mi aportación, confiando que dentro de tres o seis años no volvamos a ver
los tractores dando vueltas a la Muralla.
Cuando los problemas son complejos, cuando no hay un
culpable ni una causa concreta, es necesario tocar todas las teclas de forma
armónica. Buscar culpables es tremendamente estéril y lo único que se logra es
envenenar aún más el ambiente.