La dificultad de iniciar un tema como el que nos ocupa, quizás resida en los propios tópicos que nos tientan de forma casi irresistible. La innovación es sin duda un campo apasionante en el que puede llegar a ser grato perderse; mientras que el concepto de sostenibilidad puede contener numerosas acepciones que van desde una visión meramente económica a aspectos puramente ecológicos, ambos de tremendo interés.