Durante esta semana hemos oído que las cosas no van bien en nuestro PIB tras caer el cuarto trimestre un 0,3 %, primera condición para que entremos en un periodo de recesión. Pero para que suframos lo que los economistas llaman estanflación, esta situación deberá ir acompañada de una inflación más o menos pronunciada; para lo que contamos con el siempre socorrido petróleo que anda tentando el techo de los 120 $ y con la inestable situación en oriente medio.