Explorando la vía láctea.

El nombre lo dice todo: la industria láctea, desde una visión completamente personal.
Leche, queso, requesón, yogur, nata, mantequilla , butter oil, leche en polvo, leche condensada, leche evaporada, suero, WPC, lactosa ...

lunes, 21 de marzo de 2011

La tormenta perfecta.

D. Pedro Astals nos recordaba el viernes que vivimos tiempos de gran incertidumbre y hacía hincapié en el fuerte desequilibrio del balance mundial de materias primas; dos de los grandes problemas a los que se enfrenta en la actualidad esta industria. 




Por su parte el profesor Sir John Beddington -principal asesor científico del Primer Ministro del Reino Unido- ha mencionado la amenaza de una "tormenta perfecta", con la combinación de crecimiento de la población, la disminución de recursos para la producción alimentaria y el cambio climático. 


Ya lo cite en un anterior post, pero me he vuelto a encontrar con “El futuro de la alimentación mundial y del sistema agrícola y su desarrollo hasta el año 2050” recientemente publicado en Inglaterra. Esta vez referenciado por el Servicio de Vigilancia Tecnológica Internacional de nuestros vecinos franceses, servicio del que también os recomiendo la lectura de este otro informe sobre El crecimiento de la población, un reto para la ingeniería.

Como lo han resumido en cuatro líneas, os copio los puntos clave.

El actual sistema mundial de alimentos no es ni eficiente (925 millones de personas sufren de desnutrición) ni sostenible (ya que utiliza los recursos naturales más rápido de lo que se reponen).

La situación es probable que empeore en los próximos años bajo el efecto combinado del cambio climático, la competencia por los recursos y sobre todo el crecimiento de la población, que podría alcanzar los 9 mil millones de seres humanos 2050.

Para satisfacer la creciente demanda, una proyección realizada por la FAO en 2009 prevé la necesidad de un aumento del 70% de la producción de alimentos en el período 2000-2050.

Con el fin de evitar garantizar la seguridad alimentaria de la población, se requieren medidas inmediatas en muchos frentes. En particular, los responsables políticos de todo el mundo deben darse cuenta de que los temas de alimentación y la agricultura están vinculadas a las de energía, agua, biodiversidad y cambio climático.

Las áreas en que se tendrían que centrar los esfuerzos:
- El equilibrio entre la oferta y la demanda de alimentos.
- La reducción de residuos.
- Una mejor gobernanza del sistema alimentario mundial (lo que implicaría la reducción de las barreras arancelarias y los subsidios que los agricultores del primer mundo disfrutan, a diferencia de los países en desarrollo).

El informe destaca la importancia de la inversión continua en investigación y desarrollo en ciencias naturales y también las ciencias sociales; siendo especialmente relevante la contribución de los científicos que tienen como objetivos:
- Producir más alimentos con menos costos ambientales.
- Responder a las nuevas amenazas, como las plagas o enfermedades que afectan los cultivos;
- Desarrollar nuevas variedades de plantas que puedan soportar la sequía, así como las inundaciones causadas por el cambio climático;
- Ser más capaz de satisfacer las necesidades de las poblaciones más pobres.

El documento recomienda no excluir a priori ninguna tecnología, por razones morales o éticas, dejando la puerta abierta a la utilización de organismos genéticamente modificados, la clonación y la nanotecnología. Haciendo hincapié en que los resultados de la investigación se transformen en avances concretos para las poblaciones afectadas por la desnutrición.
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¿Donde deja esto a nuestro sector lácteo?, pues a mi modo de ver en una situación un poco complicada, sobre todo si nuestras vacas deben competir con los propios humanos para aprovisionarse de cereales, soja u otros nutrientes. 

Esta situación provocaría que solo una ganadería extensiva en zonas concretas pudiera ser competitiva, siempre que esos territorios no sean absorbidos por cultivos más rentables, como ya ha ocurrido en algunos países como Argentina.


Como consecuencia adicional, según la FAO ya se están produciendo subidas continuadas en el precio mundial de los productos lácteos al consumidor final, alcanzando ya valores récord para el indice de su observatorio. Aunque aquí, no se si estaremos asistiendo a una progresiva devaluación de las monedas fiat con respecto a las materias primas en general.



Jo, ¡¡¡Puro optimismo!!!. 

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